PREGUNTAS FRECUENTES
Es un grifo que mantiene la temperatura del agua constante durante su uso. Además le protege de los cambios de presión en el suministro de agua.
El termostato mezcla el agua fría y caliente para conseguir la temperatura elegida, pudiendo reajustar tanto caudal como temperatura en cualquier momento.
Las principales ventajas de estas griferías son la seguridad, el confort y el ahorro.
Muy recomendable en hogares con niños o gente mayor, con pieles más delicadas a los cambios bruscos de temperatura del agua
Gres Porcelánico: es el material más utilizado debido a que cumple todos los requisitos para ser colocado en exterior. Se trata de un gres muy resistente, con una absorción muy baja o casi nula y resiste perfectamente los cambios de temperatura. Idóneo para estas superficies.
NOTA: Este tipo de material debe de ser colocado con un Cemento Cola tipo C2
Gres Cerámico: se trata de un material, por lo general, más fino que el porcelánico y ligeramente menos resistente que este. Suele tener poca absorción.
Gres de Barro: su característica principal es la destonificación. El color suele variar en cuanto al tono. Es más poroso que las opciones anteriores y tiene un canto más irregular.
Baldosín Catalán: es la opción más económica. Es un material más débil de todos y con una gran absorción. Tiene muy poca resistencia tanto al impacto como al desgaste. Poco recomendado para superficies transitables.
Es un material que por su fabricación cumple todos los requisitos para ser colocado tanto en interior como en exterior. Se trata de un gres muy resistente, con una absorción de agua muy baja o casi nula y resiste perfectamente los cambios de temperatura. Idóneo para exterior.
Son baldosas, normalmente porcelánicas, con el canto cortado en ángulo de 90 grados. A esta terminación se llega mediante un proceso por el cual un chorro de agua lanzado a presión devasta los cantos y transforman el borde curvo del azulejo tradicional en un acabado con borde recto perfecto.
Aconsejamos utilizar sistemas de nivelación para este tipo de material.
Si, pero con algunos matices que te explicamos a continuación.
Lo primero es limpiar de impurezas el antiguo pavimento y dejarlo secar.
Sanear posibles desperfectos y nivelar de nuevo, si fuera necesario, con los morteros especiales para ello (morteros de reparación y de nivelación)
Una vez preparada la superficie, esparcir el mortero cola (recomendamos mortero cola flexible) con una llana dentada y colocar el nuevo pavimento dejando una junta de al menos 2 mm.
Dejar secar durante 10-12 horas antes de hacer el rejuntado